Febrero: Entre amor, amistad y Asperger
En el mes de febrero, para la mayoría es el mes del amor, de San Valentín, o quizá de su cumpleaños. Muy pocos saben que para muchas familias ese mes tiene una fecha especial que conmemora algo que ellos viven los 365 días del año: el Síndrome de Asperger.
El 18 de febrero es el día, y sólo familiares, terapeutas, psicólogos y algún docente se dedican a promover o dar a conocer en redes sociales lo que el Asperger es y significa para ellos. El resto del mundo, permanece inmune ante la fecha y ante las publicaciones que aparecen en los muros de sus amigos, ni siquiera un “me gusta” le dan, mucho menos lo comparten. Y es que a muchos nos ha tocado conocer de cerca esta condición, pero hay quienes no tienen idea de lo que es. Desafortunado es, que ni siquiera por enriquecer su conocimiento abran las publicaciones o algún buscador en la red para encontrar información al respecto.
En febrero, algunos aprovechamos la oportunidad para alzar la voz y decir: “esto es Asperger”, mi hijo, mi alumno, ese que tu críticas por no saludar, por no recibirte el beso o abrazo, ese que ves distraído o ausente, ese que dice la verdad sin filtros ni hipocresías y no entiende cuando le hago un gesto o señal para que calle, ese que habla como experto sobre un tema o simplemente usa el lenguaje más correcto y avanzado para alguien de su edad, ese “pequeño profesor” que se interesa más por las pláticas de gente “grande” y no le interesa tener un repertorio muy amplio de amistades, pues en ocasiones disfruta más la soledad que el bullicio… ese niño o joven no está mal educado, no es grosero, raro, pedante o excéntrico… Ese ser humano tiene Síndrome de Asperger.
Es importante definir primero que no es una enfermedad, sino una condición de vida, por lo que no hay “una cura” que haga que desaparezca. Se nace con ello y permanece en la vida. Está dentro del gran Espectro Autista, pero no es un autismo clásico y las mismas personas con Asperger dicen necesitar su propio reconocimiento como tales y no les parece “desaparecer” dentro de los manuales de la Psiquiatría Americana para ser integrados o reubicados dentro de otros síndromes o trastornos que ahí se incluyen, como se ha pretendido en las últimas ediciones.
Las terapias adecuadas ayudan mucho a eliminar obstáculos que se presentan en el camino. No son ángeles. “niños índigos”, ni tienen su propio planeta, ellos son seres como cualquier otro y viven en este planeta. Debo decir que a veces muestran más talentos que aquellos que nos consideramos “normales” o como ellos mismos nos llaman “neuro-típicos”. Su memoria, sensibilidad, habilidad musical, o lógica- matemática sorprenden a muchos y compensan las áreas sociales en las que requieren apoyo. Son personas de todas las edades y están en todos lados. No solo son niños que asisten al colegio, son adultos jóvenes y mayores que ejercen una profesión o desempeñan cierta función dentro de tu lugar de trabajo. Son médicos, inventores, ingenieros, chefs, actores, directores de cine, técnicos, padres de familia.
Lo más importante que se debe conocer es que todos son únicos, distintos entre ellos, solo con características comunes. En algunos puede ser predecible a distancia que tienen Asperger, en cambio otros tienen características muy leves y habilidades tan desarrolladas, que jamás pensarías que lo tienen, pasan desapercibidos y algunos ni siquiera llegan a recibir un diagnostico en la vida o lo descubren a edades más avanzadas.
Cuando conoczcas a alguien con Asperger, no te formes la idea que todos serán iguales, porque esto no será así. Las diferencias y retos que atraviesa cada uno pueden ser muy distintas. ¡Conoce, aprende, comprende y no te quedes sin la oportunidad de crecer como ser humano!
El 18 de febrero es el día, y sólo familiares, terapeutas, psicólogos y algún docente se dedican a promover o dar a conocer en redes sociales lo que el Asperger es y significa para ellos. El resto del mundo, permanece inmune ante la fecha y ante las publicaciones que aparecen en los muros de sus amigos, ni siquiera un “me gusta” le dan, mucho menos lo comparten. Y es que a muchos nos ha tocado conocer de cerca esta condición, pero hay quienes no tienen idea de lo que es. Desafortunado es, que ni siquiera por enriquecer su conocimiento abran las publicaciones o algún buscador en la red para encontrar información al respecto.
En febrero, algunos aprovechamos la oportunidad para alzar la voz y decir: “esto es Asperger”, mi hijo, mi alumno, ese que tu críticas por no saludar, por no recibirte el beso o abrazo, ese que ves distraído o ausente, ese que dice la verdad sin filtros ni hipocresías y no entiende cuando le hago un gesto o señal para que calle, ese que habla como experto sobre un tema o simplemente usa el lenguaje más correcto y avanzado para alguien de su edad, ese “pequeño profesor” que se interesa más por las pláticas de gente “grande” y no le interesa tener un repertorio muy amplio de amistades, pues en ocasiones disfruta más la soledad que el bullicio… ese niño o joven no está mal educado, no es grosero, raro, pedante o excéntrico… Ese ser humano tiene Síndrome de Asperger.
Es importante definir primero que no es una enfermedad, sino una condición de vida, por lo que no hay “una cura” que haga que desaparezca. Se nace con ello y permanece en la vida. Está dentro del gran Espectro Autista, pero no es un autismo clásico y las mismas personas con Asperger dicen necesitar su propio reconocimiento como tales y no les parece “desaparecer” dentro de los manuales de la Psiquiatría Americana para ser integrados o reubicados dentro de otros síndromes o trastornos que ahí se incluyen, como se ha pretendido en las últimas ediciones.
Las terapias adecuadas ayudan mucho a eliminar obstáculos que se presentan en el camino. No son ángeles. “niños índigos”, ni tienen su propio planeta, ellos son seres como cualquier otro y viven en este planeta. Debo decir que a veces muestran más talentos que aquellos que nos consideramos “normales” o como ellos mismos nos llaman “neuro-típicos”. Su memoria, sensibilidad, habilidad musical, o lógica- matemática sorprenden a muchos y compensan las áreas sociales en las que requieren apoyo. Son personas de todas las edades y están en todos lados. No solo son niños que asisten al colegio, son adultos jóvenes y mayores que ejercen una profesión o desempeñan cierta función dentro de tu lugar de trabajo. Son médicos, inventores, ingenieros, chefs, actores, directores de cine, técnicos, padres de familia.
Lo más importante que se debe conocer es que todos son únicos, distintos entre ellos, solo con características comunes. En algunos puede ser predecible a distancia que tienen Asperger, en cambio otros tienen características muy leves y habilidades tan desarrolladas, que jamás pensarías que lo tienen, pasan desapercibidos y algunos ni siquiera llegan a recibir un diagnostico en la vida o lo descubren a edades más avanzadas.
Cuando conoczcas a alguien con Asperger, no te formes la idea que todos serán iguales, porque esto no será así. Las diferencias y retos que atraviesa cada uno pueden ser muy distintas. ¡Conoce, aprende, comprende y no te quedes sin la oportunidad de crecer como ser humano!
Diana Karina Corral Alanis (LED '01)
Master intervención Dificultades del Aprendizaje (ISEP/ Univ. Vic)
Certificada Maestra Bilingüe y en Inglés como 2a Lengua por TEA (Texas Education Agency)
Maestra de primaria y líder de grado en las escuelas públicas de Texas ( 5 años)
Fundadora y directora de TEKS Institute y Little Genius kindergarten (Reynosa, Tam.) desde el 2008 a la fecha.
Participante en Congresos de Trastornos del desarrollo (Espectro autista).
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